El yarsagumba, un hongo milenario del Himalaya al que se atribuyen sorprendentes propiedades a nivel sexual, se ha convertido en un gran negocio millonario, que ha derivado en “guerras” y sobreexplotación.
Cuenta la leyenda que hace más de 1.000 años, los ganaderos que llevaban en primavera a sus yaks a pastar en las cordilleras del Himalaya, a entre los 3.500 y los 5.000 metros de altitud, observaron que éstos, al comer una planta, parecían recibir una dosis extra de energía y veían aumentado su apetito sexual. Se trataba del yarsagumba, un hongo conocido hoy como la ‘viagra del Himalaya’, cuyo mito sobre sus propiedades farmacológicas y afrodisíacas ha llegado hasta nuestros días y ha traspasado fronteras en el continente asiático.
Su fama se expandió especialmente desde que en 2001 se despenalizó su recolección, transporte y exportación (que hasta entonces se fraguaba en el mercado negro), generando un boom en su venta que también fue acompañado por una inflación sin precedentes. No en vano, se estima que la yarsagumba puede llegar a mover un mercado de casi 8.000 millones de euros al año del que, como casi siempre, sacan especial tajada los comerciantes finales, en este caso en China, donde se puede llegar a pagar la yarsagumba por 100.000€ el kilo –un precio superior al del oro–, casi diez veces más de lo que suelen cobrar los recolectores nepalíes que cada primavera se juegan la vida en el Himalaya.
Según un metaanálisis publicado en 2006 la yarsagumba aumenta el número total de espermatozoides, el porcentaje de células espermáticas móviles y la testosterona sérica
Qué es el yarsagumba y qué propiedades se le atribuyen
El yarsagumba (ophiocórdyceps sinensis en terminología científica), es uno de esos milagros inexplicables de la naturaleza, una especie de gusano que se ve parasitado por un hongo que crece bajo tierra en la época de las lluvias veraniegas de la región. Durante las heladas del invierno, el gusano parasitado es momificado y de él, durante la primavera, crece hacia el exterior una planta, la codiciada ‘viagra natural del Himalaya’ o ‘Himalayan Gold’, en cuya búsqueda parten miles de habitantes de la zona, familias enteras de Nepal, el Tíbet, Bután o la India, para garantizarse económicamente la subsistencia con los beneficios conseguidos por la venta de esta planta que solo crece más allá de los 3.500 metros de altura.