Se trata del molnupiravir, cuyos estudios comenzaron el año pasado por parte de investigadores de la Universidad de Georgia. Qué efectividad tendrá, según los especialistas
Además del desarrollo de las vacunas contra el COVID-19, los laboratorios junto a los científicos de universidades están trabajando para desarrollar medicamentos eficaces para tratar la enfermedad, desde aquellos que generen una inmunidad hasta los que sirvan para tratar sus formas moderada y grave.
En ese camino, un fármaco que está en etapa experimental desde el año pasado para prevenir el COVID-19, mostró una serie de resultados positivos en un estudio preliminar, publicado en la prestigiosa revista Nature Microbiology en diciembre pasado por investigadores de la Universidad de Georgia, en Atlanta. El laboratorio Merck Sharp & Dohme (Merck&Co en Estados Unidos y Canadá) lleva adelante un amplio estudio en ese sentido.
El pasado 3 de diciembre, los doctores Robert M. Cox, Josef D. Wolf y Richard K. Plemper, del Instituto de Ciencias Biomédicas de la Universidad Estatal de Georgia, Estados Unidos, habían publicado el estudio científico sobre el molnupiravir, la droga que promete interrumpir los contagios en 24 horas.
Ahora llegará una nueva etapa, ya que en las últimas horas, Merck (MSD) y Ridgeback Biotherapeutics anunciaron el inicio del ensayo clínico de Fase 3 Move-Ahead para evaluar el fármaco molnupiravir. Se trata de una terapia antiviral oral para la prevención de la infección por COVID-19. El estudio se llevará a cabo en personas mayores de 18 años que residen en la misma casa que alguien con síntomas de coronavirus y que haya dado positivo en SARS-CoV-2.
El vicepresidente senior de vacunas, enfermedades infecciosas e investigación clínica de MSD Research Laboratories, Nick Kartsonis, dijo que “a medida que la pandemia continúa evolucionando y se están reportando brotes en muchos lugares del mundo, es importante que investiguemos nuevas formas de proteger a las personas expuestas al virus de infectarse con enfermedad sintomática”. Agregó que, si el fármaco tiene éxito, “podría proporcionar una importante opción adicional para reducir la carga de COVID-19 en nuestras comunidades”.
Desde MSD dijeron que “la seguridad y eficacia de molnupiravir también se está evaluando actualmente en la Parte 2 del ensayo Move-Out, en curso, un estudio global de Fase 3, aleatorizado, controlado con placebo, doble ciego y multicéntrico, en pacientes adultos no hospitalizados con COVID-19 leve a moderado, confirmado por laboratorio y al menos un factor de riesgo asociado a resultados desfavorables de la enfermedad”.
El ensayo Move-Ahead (MK-4482-013) (NCT04939428) contará con más de 1.330 participantes, que recibirán 800 mg de molnupiravir o placebo por vía oral cada 12 horas durante cinco días. Quedan excluidos del estudio las personas que hayan recibido una dosis de la vacuna contra la COVID-19 hace más de una semana, pasado la enfermedad con anterioridad o tengan síntomas de coronavirus.
En el ensayo, participarán países de todo el mundo, entre ellos Argentina, España, Brasil, Colombia, Francia, Guatemala, Hungría, Japón, México, Perú, Filipinas, Rumanía, Rusia, Sudáfrica, Turquía, Ucrania y Estados Unidos también formarán parte del estudio.
El molnupiravir es un antiviral cuyo nombre técnico es MK-4482/EIDD-2801, y se trata de es un inhibidor de ribonucleósido que se administra por vía oral. En principio, fue diseñado para tratar la gripe y evitar que el virus haga copias de sí mismo, creando errores durante la replicación del ARN viral. De comenzarse el tratamiento a tiempo, los contagiados podrían obtener grandes beneficios para ellos y el resto de la sociedad debido a que el medicamento podría detener el paso a la gravedad del paciente, hacer más breve su infección y evitar los brotes comunitarios.
“Esta es la primera demostración de un medicamento disponible por vía oral para bloquear rápidamente la transmisión del SARS-CoV-2”, dijo Plemper. De acuerdo a la publicación en la revista científica, este fármaco antiviral podría evitar que los portadores del virus desarrollen síntomas graves y transmitan la enfermedad, además de contener los brotes locales “en un solo día”.
Debido a que el medicamento se puede tomar por vía oral, el tratamiento puede iniciarse temprano para obtener un beneficio potencial triple: inhibir el progreso de los pacientes a una enfermedad grave, acortar la fase infecciosa para aliviar el costo emocional y socioeconómico del aislamiento prolongado del paciente y silenciar rápidamente los brotes locales.
“Observamos desde el principio que MK-4482 / EIDD-2801 tiene una actividad de amplio espectro contra los virus de ARN respiratorios y que el tratamiento oral de los animales infectados con el fármaco reduce la cantidad de partículas virales diseminadas en varios órdenes de magnitud, lo que reduce drásticamente la transmisión”, afirmó el Plemper. “Estas propiedades hicieron de MK-4482 / EIDD / 2801 un poderoso candidato para el control farmacológico de COVID-19”, sostuvo entonces Plamper que utilizó un modelo de hurón para probar el efecto del fármaco para detener la propagación del virus.
Los voluntarios tomarán tres dosis diferentes cada 12 horas durante cinco días en pacientes con COVID-19
Los voluntarios tomarán tres dosis diferentes cada 12 horas durante cinco días en pacientes con COVID-19
“Creemos que los hurones son un modelo de transmisión relevante porque propagan fácilmente el SARS-CoV-2, pero en su mayoría no desarrollan una enfermedad grave, que se parece mucho a la propagación del SARS-CoV-2 en adultos jóvenes”, indicó el doctor Robert Cox, becario postdoctoral en el grupo Plemper y coautor principal del estudio.
En la primera etapa del estudio, los investigadores infectaron hurones con SARS-CoV-2 e iniciaron el tratamiento con MK-4482 / EIDD-2801 cuando los animales comenzaron a eliminar el virus por la nariz. “Cuando compartimos a los infectados y luego tratamos a los animales de origen con hurones de contacto no tratados en la misma jaula, ninguno de los contactos se infectó”, dijo Josef Wolf, estudiante de doctorado en el laboratorio de Plemper y coautor principal del estudio. En comparación, todos los contactos de los hurones de origen que habían recibido placebo se infectaron. Si estos datos basados en hurones se traducen en humanos, los pacientes con COVID-19 tratados con el medicamento podrían volverse no infecciosos dentro de las 24 horas posteriores al inicio del tratamiento, según el estudio financiado por subvenciones para servicios de salud pública de los Institutos Nacionales de Salud / Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas del estado de Georgia.
MK-4482 / EIDD-2801, que se toma en tres dosis diferentes cada 12 horas durante cinco días en pacientes con COVID-19 también tiene una actividad de amplio espectro contra otros virus respiratorios de ARN, ya que reduce la cantidad de partículas virales diseminadas en varios órdenes de magnitud, disminuyendo de manera drástica la transmisión, señalan los científicos.