El fomento en materia de tecnología en sectores públicos y privados del país puede tener un impacto significativo en múltiples aspectos de la sociedad. En ese sentido, el nuevo presidente de Paraguay, Santiago Peña, asumirá en agosto y se espera que marque un hito en la historia del país con una revolución tecnológica sin precedentes. En este contexto, se han identificado cinco pilares fundamentales en los que el nuevo gobierno debería enfocarse para impulsar el desarrollo tecnológico.
El primer pilar es la infraestructura digital, que busca garantizar una sólida y confiable infraestructura en todo el país, expandiendo la cobertura de Internet de alta velocidad, especialmente en áreas rurales y remotas, mediante la implementación de tecnologías como 3G, 4G y fibra óptica.
El segundo pilar es la educación digital, que busca capacitar a la población en habilidades digitales para aprovechar al máximo las oportunidades que brinda la era digital. Esto implica implementar programas educativos que abarquen desde la enseñanza básica hasta la formación técnica y profesional.
El tercer pilar es la economía digital, que busca promover emprendimientos digitales para estimular el crecimiento económico y reducir la brecha de desigualdad. Esto se logra mediante la creación de incubadoras y aceleradoras de startups, facilitando el acceso a financiamiento y atrayendo inversionistas.
El cuarto pilar es el gobierno electrónico, que busca digitalizar los servicios públicos para mejorar la eficiencia, transparencia y accesibilidad, reduciendo la burocracia y los costos asociados. Esto implica la implementación de plataformas digitales para facilitar la interacción ciudadana con el gobierno.
El quinto pilar es la inclusión digital, que busca garantizar que todos los ciudadanos puedan beneficiarse de la digitalización. Esto implica implementar políticas de acceso equitativo a Internet, proporcionar computadoras y promover la alfabetización digital.
Para lograr estos pilares, se requiere voluntad política, una hoja de ruta clara y establecimiento de políticas claras, así como estabilidad y predictibilidad en las inversiones y alianzas con el sector privado y cooperaciones internacionales.
Impulsar la tecnología en todos los aspectos impulsará el crecimiento económico, mejorará la calidad de vida de los ciudadanos y garantizará la competitividad de Paraguay a nivel internacional.