El fiscal Rodrigo Espínola, junto con sus colegas Francisco Cabrera y Néstor Coronel, presentó este lunes los alegatos finales en el juicio contra el exgobernador de Central, Hugo Javier González, acusado de liderar un esquema de desvío de fondos públicos durante la pandemia del COVID-19. El Ministerio Público solicita una condena de 10 años de prisión para González por el desvío de G. 5.105 millones, los cuales fueron malversados bajo el pretexto de financiar proyectos de obras civiles que nunca se realizaron.
En su intervención, Espínola destacó que el daño causado va más allá del monto sustraído, ya que atentó directamente contra la capacidad del Estado para atender la emergencia sanitaria que golpeaba duramente a la población. «En ese momento, la gente se quedaba sin trabajo, se realizaban ollas populares para subsistir, y a estas personas no les importó», expresó el fiscal, subrayando la gravedad de los hechos en medio de una crisis sanitaria global.
El caso se refiere a pagos fraudulentos por la suma de G. 5.105 millones a 14 proyectos inexistentes, gestionados por la Gobernación de Central durante el 2020, en pleno apogeo de la pandemia. Según la Fiscalía, estos recursos fueron desviados a favor de un esquema delictivo montado por el exgobernador y otros implicados.
Además de la solicitud de condena para Hugo Javier, los fiscales también abordan las responsabilidades de otras personas involucradas en el desvío de fondos, quienes se encuentran bajo acusación por lesión de confianza. Este juicio ha sido uno de los más relevantes en términos de corrupción durante la crisis sanitaria en Paraguay, y se espera una resolución en los próximos días.
