El Presupuesto General de la Nación (PGN) para el 2021, a pesar del pedido expreso del P.E. de no aumentar los gastos, debido a la escasez de recursos generada por la pandemia, fue sancionado con partidas “infladas”, sin contemplar ninguna política de austeridad tal como imponen los tiempos y a la cual está sometida toda la ciudadanía, excepto el sector público.
Cómo ejemplo vale mencionar algunos registros que, por lo burdo, sobresalen en general, y son una muestra más de aquellos que los legisladores manipularon dilapidando irresponsablemente el dinero público.
La Cámara de Senadores, que esta vez lideró la rebelión presupuestaria, se destacó por resolver un aumento de gastos y modificación de normas que solamente redundarán en aumentar los montos destinados para el pago de sueldos, aguinaldos y gastos de representación previstos dentro del Presupuesto General de la Nación (PGN) del próximo año.
El presupuesto ha sufrido un aumento del 9% para “servicios personales” en el PGN 2021 de la Cámara Alta. Este incremento no fue incorporado en la versión del PGN de Diputados, que mantuvo intacto el plan de gastos del Ejecutivo.
En la última versión del presupuesto elaborada por el Senado se decidió elevar los montos previstos para el pago a funcionarios públicos de G. 73.103 millones para Servicios personales en la versión original a G. 79.972 millones en la versión del Senado, una diferencia de G. 6.869 millones.
Otra partida destacable es el convenio firmado con los agricultores que cerraron el microcentro de la Capital reclamando una ayuda que resultó en la asignación de recursos, por U$S 25.000.000 de dólares para la agricultura familiar, donde la mayoría de los reclamantes tienen poco o nada de agricultores. Lo más grave es que esta partida presupuestaria será distribuida por las organizaciones campesinas y no por el Ministerio de Agricultura y Ganadería tal como un razonamiento lógico lo impone. También este fue un agregado de la Cámara de Senadores, cambiando la redacción que venía de Diputados.
Con los “agregados” realizados por los legisladores el PGN cierra con un déficit equivalente al 4% del PBI cuando la ley de responsabilidad fiscal exige que dicho déficit no supere el 1,5% del PBI.
Además de los aumentos del presupuesto, en el Senado también realizaron cambios dentro del ámbito normativo del PGN 2021. Modificó el artículo 57 de la legislación para permitir la contratación de nuevo personal sin autorización del Equipo Económico Nacional (EEN).
También, se cambió el artículo 58 donde se estableció que el Poder Legislativo podrá realizar promociones de cargos, con excepción de lo establecido en la Ley N° 1626/2000 “De la función pública”, por tanto, el Congreso podrá realizar promociones sin necesidad de respetar la ley impuesta para los demás entes públicos.
Es necesario que la ciudadanía se exprese sobre este abuso en el destino de los fondos públicos, para evitar que se sigan derrochando recursos que no tienen financiamiento genuino, y tampoco se ajusta a las normas vigentes, las cuales se van transformando en letra muerta. La contrapartida para financiamiento de gastos será la toma de créditos, arrastrando progresivamente al país al borde de un abismo económico como hemos visto que ha ocurrido en otros países de la región.