La cáscara de mandarina, más allá de ser un desecho común, ofrece múltiples beneficios para la salud, especialmente durante la temporada de resfriados y gripes. Este cítrico, reconocido por su alto contenido de vitamina C y antioxidantes, ayuda a fortalecer el sistema inmunológico, combatir bacterias y aliviar problemas digestivos.
Mientras los gajos son los protagonistas habituales, la cáscara contiene aceites esenciales con propiedades relajantes y antibacterianas. Además, su uso en infusiones es una forma natural de aprovechar al máximo sus beneficios, ayudando a la digestión y reduciendo la inflamación.
Receta: té de cáscara de mandarina
Preparar té con cáscara de mandarina es sencillo y reconfortante. Aquí te mostramos cómo hacerlo:
Ingredientes:
- 2 cáscaras de mandarina bien lavadas.
- 500 ml de agua.
- Miel o jengibre para potenciar el sabor.
Preparación:
- Lava las cáscaras para eliminar residuos de pesticidas.
- Hierve 500 ml de agua en una olla.
- Añade las cáscaras y cocina a fuego lento por 10-15 minutos.
- Cuela y sirve caliente. Puedes endulzar con miel o agregar jengibre para un toque extra de sabor.
Este té no solo es aromático y delicioso, sino que también contribuye a reforzar el sistema inmunológico, mejorar la digestión y brindar una sensación de bienestar general. Aprovecha esta alternativa saludable para combatir las molestias del frío y disfrutar de una bebida natural y nutritiva.