El árbitro Éber Aquino tuvo una buena actuación, no incidió en el resultado final del Clásico, pero quedaron jugadas reclamadas, en especial por los hinchas azulgranas. Especialmente la no expulsión de Roque tras una falta a Lucena.
Sobre este punto, Aquino explicó que no vio un contacto pleno en la jugada y mucho menos fuerza desmedida. «Se tiene que analizar con qué golpea y dónde. También cuenta la intensidad. «Él (Roque) tenía el otro pie anclado (en el césped), si era en una divididida iba a ser diferente, iba a ser con mayor intensidad. La fuerza no llenó para una roja».
Otra situación reclamada fue la amarilla a Alexis Duarte, quien según el juez entra con la rodilla contra la espalda de Jorge Recalde.
Con relación al gol anulado a Claudia Aquino, por mano de Enzo Giménez en el inicio de la jugada, el árbitro mencionó que en el primer golpe de vista le pareció que el jugador de Cerro lleva el balón con el hombro. «Giménez hace una inclinación con el cuerpo y me pareció que le pegó en el hombro. No tenía claro que tan abierto tenía el brazo, luego la fui a revisar y efectivamente se lleva la pelota con el brazo».
Ya sobre el final del partido, Aquino detuvo el juego para recibir asistencia médica por una molestia en la pantorrilla izquierda. «El clásico fue de ida y vuelta, sobre todo en el segundo tiempo hubo varios contragolpes. Terminé corriendo 11 kilómetros y medio».
